Con Septiembre llega el frio y el agua, otra vez. Y a la deriva, el viento juega conmigo, me lleva, me arrastra, y yo me dejo llevar donde ordenes tú...
Lo sé, no encontrare refugio antes de que llegue el huracán.
Lo sé... Volverá a doler otra vez.
Y no sé si me importa, no sé si me duele, no sé si quiero, no sé si puedo dejar que pase otra vez.
Y como siempre, nunca nada es lo que parece.
Las calles vacías de gente son tomadas por la lluvia. Las gotas desdibujan el cartel de una fachada ya abandonada.. "Cerrado por derribo", que sueña con tiempos mejores. Y poco a poco, la caricatura de mí se desdibuja también. Se borra, transforma, desaparece arrastrada en brazos del viento. Y me sigo dejando llevar, otra vez, como siempre, donde ordenes tú..
Un puñal que se clava por cada mentira,
ciega los ojos y hiere las manos
El invierno sembró su odio en el corazón
vino el verano y lo secó
Por cada corazón roto,
una vida llegará.
Por cada sueño apagado
una estrella nacerá.
Sabor a sal, rumor del mar.
Septiembre llega al final.
Las gaviotas, ¿de donde vendrán?
Voces resuenan y quedan atrás.
Días en los que creíste poder volar.
Tus gaviotas se han ido
y ya no volverán.
Llora porque nunca las podrás imitar.
La espuma salpica sus alas...
y las gaviotas dónde irán?
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